China, durante los últimos 70 años ha sido testigo de profundos cambios, logrando un desarrollo sin precedentes y poniéndose a la vanguardia de la economía mundial, con un impacto cada vez más integral, profundo y prolongado, mediante interacciones con naciones de diferentes continentes, diferentes gobernanzas e ideologías. En este sentido, el presente artículo aporta una visión crítica y analítica sobre el comportamiento político y económico del país asiático en la esfera global, bajo el criterio de una investigación cualitativa de tipo documental. Para ello, se realizó una retrospectiva en el aspecto ideológico, histórico y evolutivo de China, considerada hoy día como la única economía en el mundo que ha registrado un crecimiento y una sólida recuperación de la economía a pesar de la pandemia de COVID-19. Se llega a la conclusión que el gigante asiático, se ha destacado por su rápido progreso económico, su poderío militar y el incremento de su influencia internacional, al cual se le puede atribuir una potencia prominente, bajo su criterio de país socialista con características chinas; en sintonía con un programa de reforma e innovación, en la búsqueda del desarrollo y nuevas oportunidades.